martes, 30 de septiembre de 2014

Viejos cuentos de nuevo

Hace unos meses, y como parte de mis tareas para celebrar estos veinte años de cuento, traté de organizar, de una manera ordenada, los espectáculos de narración oral que tengo vivos en mi repertorio. Esta labor ha sido compleja porque muchos de estos espectáculos estaban perfectamente detallados para mí, pero no había prácticamente nada elaborado hacia afuera (sí, ahora lo sé, gran error).
Además de la falta de información y enlaces sobre los espectáculos, había una carencia notable en cuanto a los carteles para anunciar y difundir mis propuestas de narración oral. Es por eso que en estos últimos meses he tratado de suplir esta falta, y lo he intentado trabajando con algunos de los mejores ilustradores e ilustradoras del panorama actual, pues creo que trabajar con los mejores es también una forma de dignificar nuestro oficio.
Estoy feliz porque la galería de carteles de mis espectáculos de narración cuenta con nombres de la talla de Mariona Cabassa, Pablo Amargo, Elena Odriozola, Antonio Santos, Alberto Gamón, Raquel Marín, Roger Olmos y Jesús Aguado. Y ahora se incorpora un nuevo y hermoso cartel, el del espectáculo "Viejos cuentos de nuevo", hecho por Adolfo Serra, una maravilla.
Como podéis ver en la información sobre esta sesión incluye cuentos de colecciones clásicas y medievales, por eso la propuesta del cartel que ha hecho Adolfo tiene una estética que podemos reconocer como medieval (en cuanto a los colores, la disposición, la proporción, estilo...) y que, además, está llena de referencias a cuentos que cuento en este espectáculo.
Así era el boceto inicial del cartel.


Y así ha quedado una vez lleno de historias.


Podría dar por finalizada esta tarea autoimpuesta de organización y ordenación de los materiales de los diversos espectáculos de narración oral, pero aún quedan algunos detalles. De hecho queda por llegar un último cartel (este tardará bastante aún) y hay también un asunto importante que está por hacer: quiero incluir vídeos promocionales en algunos espectáculos; otro frente al que habrá que dedicar esfuerzo y tiempo.
Saludos

Un millón de gotas

La pasada semana me llegaron unas recomendaciones de lectura a través de la web; María, bibliotecaria y amiga, desde Toledo me recomendaba, entre otros, el libro de Víctor del Árbol titulado Un millón de gotas y publicado por Destino en su colección Áncora y Delfín.


La historia de esta novelota (de más de 650 páginas) se va tramando con los diversos hilos narrativos que, según avanzan las páginas, van confluyendo y elaborando un completo tapiz en el que pasado y presente de hasta tres generaciones de una misma familia quedan anudados. Historias descarnadas y brutales (como el S. XX en el que se desarrollan) que encajan perfectamente y van armando el puzzle de la trama, y sobre todo, historias que se sostienen por la acción de unos personaje cuyos silencios esconden días y anhelos, personajes trágicos y verosímiles en su crudeza y en su ternura, personajes que tratan de sobrevivir al tiempo y al contexto que les ha tocado.
Sí, esta novela enorme se sostiene por una trama compleja y bien elaborada, rica y llena de matices, emociones y momentos de gran intensidad; pero también es una novela que se sostiene por unos personajes que son capaces de ponerla en pie a pesar de la vastedad de sus aspiraciones: una novela amplia como la estepa siberiana, y al mismo tiempo reconcentrada como las aguas de un lago en cuyo limo se ocultaran los secretos de la historia. Sí, inolvidables estos personajes (Elías, Anna, Igor, Esperanza, Gonzalo, Laura, Alcázar, Tania, Irina, Agustín, Javier, Claude, Martin, Luis, Zinóviev, Carlos, Siaka, Lola, Luisa...) que con sus deseos y miedos, con sus traiciones y sus acciones, nos invitan a pasear por las miserias y las bondades del ser humano.
La novela está, además, organizada de manera que la información que vamos conociendo según avanzamos en la lectura del libro nos va dando teselas que nos ayudan a ir conformando el mosaico, el cuadro, de la historia que nos cuenta el narrador. Cada paso está medido y en no pocas ocasiones avanzamos con el protagonista, Gonzalo, a tientas tratando de dar sentido a lo que está sucediendo, de entender por qué pasa lo que pasa. Pero en otras ocasiones hay información que vamos conociendo y sin saber aún cuál es el peso específico en el cómputo de la trama podemos ir vislumbrando que lo que unos personajes hacen o son acaba por alcanzar y repercutir sobre el resto de protagonistas a través de los años o de las páginas. Pocas veces como en esta novela se puede observar que la historia teje una red de araña cuyos nudos están conectados, cuyos personajes están engarzados.
Me sorprende la enumeración de los horrores y la dificultad a la hora de juzgar a los personajes: quizás no somos buenos o malos, nuestras acciones lo son; sucede además que el contexto en el que nos toca vivir y la propia historia personal determinan acaso en gran medida el juicio moral sobre estos actos. Uno no deja de pensar en la isla de Názino y en los horrores de las guerras, en las traiciones y en los actos heroicos. Uno no deja de reflexionar sobre todo esto mientras lee este estupendo libro.
Un libro intenso y enganchoso, una lectura absorbente. Un festín. Gracias María por la recomendación.
Una lectura que os recomiendo.
Saludos

viernes, 26 de septiembre de 2014

Cuentos de amor rasgados

Acabo de terminar de leer un libro de cuentos breves (muy breves) titulado Cuentos de amor rasgados, la autora es Marina Colasanti, narradora y escritora italobrasileña, y está publicado por la editorial tinerfeña Diego Pun Ediciones.


De esta autora ya he disfrutado otros libros de cuentos: Lejos como mi querer y En el laberinto del viento; pero Cuentos de amor rasgados, es un libro distinto pues sus cuentos son muy breves (en 215 páginas contiene 211 cuentos).
Mi percepción como lector es que con este libro me ha sucedido lo que acaso ocurre habitualmente con los libros de cuentos: hay gran variedad y eso es una ventaja pues siempre encuentras cuentos que te gustan más (y otros que te gustan menos). Aunque tratándose de esta autora (que tanto disfruto) tenía yo mucha esperanza en que la mayoría de los cuentos presentados fueran pequeñas joyas de pleno gozo, pero no, no ha sido así, ha sido como normalmente me sucede con los libros de cuentos: unos más y otros menos.
He estado pensando sobre esto y quizás tenga que ver con la extensión de los textos: Marina Colasanti es una autora con una prosa poderosa, rica, sutil y muy llena de detalles. Los microcuentos obligan a desbrozar el texto hasta dejarlo casi en su tronco desnudo. Quizás en este proceso haya cuentos que han perdido fuerza y matices. Aun así, insisto, el libro tiene un buen puñado de cuentos deliciosos y chispeantes, deslumbrantes en su fogonazo breve e intenso de palabras.
Una lectura más para mi mochila.
Saludos

miércoles, 24 de septiembre de 2014

Del contar según Cervantes

Creo que la pasión por los cuentos contados me está secando el cerebro. Acabo de publicar una ficha en mi estudio sobre oralidad que he titulado: "Del contar según Cervantes" y que habla de la narración oral desde la mirada de Cervantes.
Me lo he pasado pipa escribiendo este artículo, ahora bien, no sé si le puede interesar a alguien.
Aquí os lo dejo por si andáis desocupados, desocupadas.


Saludos

martes, 23 de septiembre de 2014

El cuento de tradición oral y el cuento literario: de la narración a la lectura

Buscando información sobre cuentos tradicionales y narración (os podéis imaginar que en cosas como estas gasto bien los días) me he topado con esta ponencia de Pascuala Morote Magán publicada originalmente en el libro La seducción de la Lectura en edades tempranas, compilación coordinada por Antonio Mendoza Fillola y publicado por el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte en 2002, que actualmente se puede encontrar en la red en la Biblioteca Virtual Cervantes, exactamente en este enlace.
Se trata de un texto bastante completo en el que plantea distintas posibilidades para acercar los cuentos tradicionales al aula y utilizarlos como elemento de educación artística y puente hacia la lectura.
Al margen de que las propuestas me resulten más o menos interesantes, el artículo incluye un montón de referencias, citas valiosas y aspectos de análisis que pueden servir para seguir profundizando en el cuento y muchos de sus elementos.
Deja además un espacio para la narración oral y habla incluso de quienes han hecho de contar su oficio, merece la pena leer el párrafo que nos dedica y que es toda una invitación a la reflexión:

"Creo que cabe aquí una reflexión sobre el fenómeno de los cuentacuentos actuales, que han hecho de la noble facultad de contar, vinculada a mitos y ritos de iniciación en sociedades primitivas, su profesión. Y aunque en esta cuestión no quiero generalizar, pues como en todo, hay cuentacuentos muy buenos profesionales, con cuyas narraciones se introduce perfectamente a los niños en el mundo imaginario de los cuentos; otros, por el contrario, están convirtiendo el hecho de contar cuentos en un espectáculo que, en ocasiones, tiene más de circense que de literario, pues seleccionan cuentos muy pobres estilísticamente, cuyos recursos esenciales se basan casi exclusivamente en demasiadas repeticiones y en la participación de los niños, que si por una parte, puede ser conveniente, por otra, se pierde el ambiente de poesía y misterio que envuelve a muchos cuentos, con lo que se puede conseguir más bien alejar a los niños de la literatura, que acercarlos para dejarse seducir por ella."

Tras este párrafo sigue hablando sobre narración oral y lectura en voz alta. Y aunque, desde mi punto de vista, el texto tiene muchas lagunas (al menos en este ámbito de la palabra dicha que creo que conozco algo) como, por ejemplo, la exclusión de la secundaria como espacio natural para los cuentos contados; digo que aunque me parece que hay lagunas, el artículo en general (y en esta parte de la narración oral también) hace un interesante esfuerzo de compilación y ordenación de elementos relacionados con el cuento y puede convertirse en un punto de partida para la reflexión, la búsqueda de nuevos textos de referencia, y sobre todo para el acercamiento del cuento tradicional y la oralidad a la escuela.
Un artículo de interés.
Saludos

lunes, 22 de septiembre de 2014

La Campana de Huesca

Los amigos Sandra Araguás (texto) y David Guirao (ilustraciones) han publicado un libro álbum titulado La Campana de Huesca, en una recién nacida editorial Sin Cabeza, un nuevo proyecto que empieza con fuerza e ilusión.


Este libro nos cuenta la leyenda de La Campana de Huesca (tenéis completísima información de la misma en la Wikipedia): el rey Ramiro II "El Monje" no consigue hacerse obedecer por sus nobles vasallos, es por eso de que decide construir una campana un tanto especial y cuyo sonido ha de oírse por toda la provincia de Huesca (y, por lo que se ve, también a través de los siglos).
Hay varias cosas que me han interesado y gustado de este libro.
Para empezar me parece una propuesta muy interesante que se utilice el formato del libro álbum para acercar leyendas locales a los chavales. Por lo que he visto creo que es más común utilizar el cómic para cuestiones de este tipo (en casa tenemos cómics que tratan de la vida en los castros gallegos; o que acercan sagas como la de los Nibelungos; o incluso clásicos como las obras de Shakespeare o la Odisea, por poner algunos ejemplos), pero, tal como muestra este libro, el formato de libro álbum tiene también mucho que contar en este ámbito.
También creo que el texto sobrio, limpio, ceñido a la historia, permite que ésta fluya alegre y que las ilustraciones desplieguen sin ataduras sus posibilidades narrativas. Desde mi punto de vista es difícil conseguir un texto que no haga ruido y que afirme la historia sin tropiezos, máxime cuando se trata de una leyenda conocida, escrita, reescrita, versionada y adaptada por escritores diversos y por el natural fluir de la oralidad. Y Sandra lo logra y de manera sobresaliente.
Por último comentar que las ilustraciones me han gustado también mucho, son poderosas, sugerentes y con un gran trabajo de investigación detrás. Valga como muestra el guiño de la penúltima lámina que hace referencia al cuadro más famoso que ilustra esta leyenda, el de José Casado de Alisal. Me ha enganchado esta propuesta estética que, además, creo que es muy adecuada a la narrativa del libro. Me ha gustado mucho el trabajo de David.
En suma, un libro que he disfrutado y una propuesta que me ha sorprendido e interesado. Os recomiendo que asoméis al libro, no os defraudará.
Saludos

jueves, 18 de septiembre de 2014

La mujer esqueleto

De vuelta ya a la rutina y pasado el verano que me permite lecturas más demoradas, recupero la buena costumbre de incluir aquí notas de lectura de libros álbum y de textos LIJ. En estos días he vuelto a releer La mujer esqueleto, un libro álbum escrito por Ana Cristina Herreros, con ilustraciones de Daniel Tornero y publicado por la recién creada editorial Libros de las Malas Compañías.


Este libro cuenta la historia de "la mujer esqueleto", un cuento tradicional de los innuit bastante conocido entre quienes contamos y escuchamos cuentos. La primera vez que me encontré con este texto fue en el libro de Clarissa Pinkola Estes: Mujeres que corren con lobos, en Zeta Bolsillo. Pero donde de verdad disfruté de esta historia fue al escuchar las distintas versiones que contaban (y cuentan) Tim Bowley (con Casilda Regueiro por aquel entonces), Virginia Imaz y Ana Griott. Todas son diferentes y tienen matices muy interesantes, pero todas cuentan una historia de gran profundidad que habla de la mujer, del miedo y de la fuerza del amor.
La versión que recoge este libro es la de Ana Griott, en ella es la mujer (o más bien la educación que no recibió) la que de alguna manera ha labrado el destino que le espera de soledad (y frío hueso). Sin embargo, al igual que en el resto de variantes que conozco, es el acercamiento al otro, la superación del miedo, y sobre todo el amor (y su alegría) lo que llena de carne ese esqueleto, lo que nos da esperanza.
Es este un cuento con múltiples capas de interpretación, pero de una intensa profundidad. Tiene además ese elemento del esqueleto que genera un cierto desconcierto, inquietud incluso, entre quienes escuchan, pero que se incorpora de manera natural a la narración. Ocurre además que las ilustraciones del álbum muestran un esqueleto muy humano, muy cercano.
El texto, por cierto, revisado por otra compañera y amiga, Paula Carbonell, tiene un estilo limpio, pulcro, que permite que la ilustración de Daniel Tornero encuentre acomodo y también cuente, también sume a la narración.
Un libro hermoso con una historia hermosa y honda. Si queréis abrir boca aquí tenéis otra versión de este popular cuento esquimal.
Un libro que os recomiendo.
Saludos

martes, 16 de septiembre de 2014

The house: la casa del forestal

El fotógrafo Miguel Ángel Langa (de FotoLanga.es) tiene un vídeo estupendo, un montaje de gran calidad, grabado en la casa que inspira la historia de "La casa del forestal", primera parte de La materia de Selas.
Podéis ver el vídeo aquí debajo o, en formato mayor, en este enlace. Espero que os guste.

The House Versión cine from Miguel Angel Langa on Vimeo.

Y no dejéis de asomaros a la web de este fotógrafo y a sus estupendos vídeos (como el de Un año en el Barranco de la Hoz).
Saludos

lunes, 15 de septiembre de 2014

Contar es pedirle un día más a la vida

Hace poco que os hablaba en este mismo blog de un libro de Gustavo Martín Garzo que me había dejado completamente enamorado, se trata de Una casa de palabras, en Océano Travesía (la nota de lectura está aquí). Esta breve nota hoy del blog es para recomendaros un artículo que escribió el pasado sábado en El País titulado "El cuarto de los niños" que habla sobre narración oral. En él dice frases tan hermosas como la que da título al post.
Por cierto, la ilustración (maravillosa) que acompaña al artículo es de una buena amiga, Raquel Marín.


¿Todavía no has leído el artículo? No lo dejes pasar.
Saludos

jueves, 11 de septiembre de 2014

El visitante de la madrugada

Acabo de terminar de leer El visitante de la madrugada, un libro con seis relatos de miedo escrito por Concha López Narváez y Carmelo Salmerón que ha publicado la editorial Bruño en su colección Paralelo Cero.


Este oficio mío de contar cuentos te impele a estar siembre buscando nuevos textos para contar, a esto deduci muchas de mis horas fuera de los escenarios y las pantallas. De todos, los cuentos más difíciles de encontrar, al menos para mí, son los buenos cuentos de miedo: historias que al leerlas te estremecen o te mantienen en tensión hasta la última línea. Normalmente me ocurre que muchos de estos textos, sostenidos por tópicos, se deshacen en los primeros párrafos. Pero a veces tengo la fortuna de dar con algún libro que te sorprende porque logra mantenerte pegado a sus páginas. Esto es lo que me ha ocurrido con El visitante de la madrugada, un libro con vocación de ser juvenil pero que se deja leer con gusto (y algún que otro estremecimiento) por lectores de todas las edades.
Estos cuentos me han recordado a los de Poe, creador del género, porque son efectivos, directos, variados y, sobre todo, son honestos. En estos textos los autores logran crear una atmósfera inquietante en la que ubican un personaje cada vez más desconcertado, que pasa de la sospecha a la terrible certeza según avanzan las páginas.
Si eres lector de este género quizás haya algún cuento cuyo desenlace puedas intuir antes de lo previsto, pero de igual manera te va a gustar: son cuentos con intención de género, con precisión clásica, con honestidad (insisto, pues ya lo dije antes) y sin trampantojos.
De los seis cuentos hay al menos cuatro que me han obligado a ser leídos del tirón, y los otros dos también han sido lecturas provechosas.
Un libro muy interesante que he disfrutado mucho. Te lo recomiendo.
Saludos

lunes, 8 de septiembre de 2014

En el laberinto de la palabra

En estos días he leído (y releído) En el laberinto de la palabra. Guía de viaje, n.º 1 de la colección Cuadernos Hexágono, publicación vinculada al grupo Círculo Hexágono y realizada por Pantalia. Este primer número contiene un ensayo de Arianna Squilloni.


Este número, tal como reza su título, nos invita a entrar en el laberinto de la palabra siguiendo el hilo de Arianna a través de los apartados de su ensayo, unos textos hermosos, pulcros, profundos y muy sugerentes que ordenan el paseo por las diversas capas de la palabra.
El viaje comienza por el sonido (que escucha el recién nacido cuando le hablamos, que balbucea más adelante, que prueba gozoso y que juega cuando juega), el sonido es el aliento de las cosas: la forma de apresar el mundo todo en el aire. Y también la selección de fonemas (y la acotación de posibilidades). Decir, nombrar, es empezar a organizar el mundo.
Luego llega el significado, esa vinculación entre lo dicho y lo referido, pero también esa fosilización, esa categorización primera del mundo en palabras que luego podemos descategorizar para jugar, para buscar el significado más allá del significado.
Continúa con las palabras que no son otra cosa que fijar el aire y entrar en la dimensión de los signos y de la percepción visual. Por eso es normal que nos adentremos en una parte muy sugerente del recorrido: las palabras como imágenes.
Continuamos el paseo con los matices y las riquezas de las diversas lenguas en esta Torre de Babel que es el mundo (y el patio del colegio). Hablar una lengua es entender el mundo, pensarlo, percibirlo... de una manera.
Finalmente el trayecto llega a la esencia misma, a la razón última: a nosotros que, inevitablemente, somos palabra y vivimos rodeados de palabra. Pero igual que la palabra nos hace, sin un criterio crítico, sin una reflexión continua, puede deshacernos, puede manipularnos.

La revista, con apenas sesenta páginas, es una fiesta desde la primera a la última palabra. Cada epígrafe está plagado de citas, referencias y reflexiones valiosísimas; y los ejemplos y bibliografía que utiliza Arianna (poeta, editora y gran conocedora del mundo de los libros) son estupendos y una continua invitación a la búsqueda y la lectura. Una propuesta que se despliega en muchas capas, que soporta y pide muchas relecturas y que tiene reflexiones deslumbrantes a cada paso. Una delicia. Un festín.
Una lectura que os recomiendo encarecidamente.
Saludos

sábado, 6 de septiembre de 2014

Recopilación de cuentos y escuela

Ayer anduve enredado con Mitos, leyendas y cuentos peruanos, un libro que fue editado por José María Arguedas (ahí es nada) y Francisco Izquierdo Ríos y que ha publicado recientemente Siruela. Leí en el prólogo cómo se procedió a la recopilación de textos: una vez más se utilizó la red de escuelas y maestros y maestras del Perú para llegar a los textos tradicionales. Esto me recordó a otras recopilaciones de textos vinculadas a la escuela que tal vez merece la pena recordar por el interés de la colección recogida o por su particularidad.

Cuando en 1936 Aurelio Espinosa hijo comenzó a recoger cuentos (recopilando una de las más importantes colecciones de cuentos tradicionales en España) utilizaba el siguiente procedimiento: cuando llegaba a un pueblo se dirigía directamente a la escuela donde, tras el permiso del maestro, preguntaba a los niños y niñas si conocían algún cuento; tras escuchar los cuentos que contaban los niños, a aquellos que habían contado mejor (una narración más rica o variada) o que habían contado cuentos que todavía no tenía en su colección (o variantes de interés) les preguntaba que quién les contaba, los niños solían responder mi abuela, mi madre, el tío tal... entonces el folclorista les decía: decidle a (la abuela, la madre, el tío tal...) que esta tarde estaré en el casino del pueblo y que por cada cuento que me cuenten, les pagaré una peseta.
La historia la recoge José Manuel de Prada Samper en El pájaro que canta el bien y el mal, en editorial Lengua de Trapo. Cuenta José Manuel que en el caso de algunas narradoras/narradores de prestigio en la localidad cuando la gente se enteraba de que iba a contar por la tarde en el casino, se llenaba. Igual que cuenta el caso de alguna narradora (Azcaria Prieto) que llegó a pasar ¡dos tardes completas! contando cuentos con el casino abarrotado de vecinos en absoluto silencio.
En este caso los niños se convertían en la pista que llevaba hasta los buenos y grandes narradores populares.

En otras ocasiones hubo maestros que directamente, y viendo la utilidad del cuento tradicional para trabajar en el aula, se pusieron manos a la obra en la recopilación de textos tradicionales. Quizás uno de los casos más conocidos es el de Marciano Curiel Merchán quien, entusiasta del folclore y la tradición, y maestro en activo, recogió a lo largo de sus años de ejercicio del magisterio más de 140 cuentos en apenas tres pueblos extremeños (Tejeda de Tiétar, Madroñera y Trujillo). Su colección de cuentos tradicionales sigue siendo un referente de mucho interés a pesar de que en Extremadura hay grandes folcloristas (como Juan Rodríguez Pastor, por ejemplo) y excelentes colecciones publicadas (como Los cuentos de Ahigal, por ejemplo).

Aunque de entre todas las propuestas de este tipo que conozco la que más me ha gustado por su peculiaridad, su interés y la vitalidad de sus textos, es la colección de cuentos que recogió Javier Villafañe con su carro de títeres por los caminos de La Mancha. A finales de los setenta y principios de los ochenta del pasado siglo el poeta, titiritero y escritor Javier Villafañe recorrió los caminos de El Quijote por tierras manchegas con su mula y su carro de títeres. Cada vez que llegaba a un pueblo se presentaba en la escuela y se ofrecía para representar su teatrillo de títeres previo pago de un cuento escrito por cada niño. De esta manera recogió más de 50.000 cuentos de niños y niñas (que hoy tendrán más o menos mi edad) en el corazón de La Mancha. De aquella descomunal colección se publicó una selección de 177 cuentos con el título de Los cuentos que me contaron por el camino de Don Quijote, un librito que estaba agotado y que tuvimos la suerte de poder recuperar para Palabras del Candil, y en verdad un libro muy interesante (mirad estos dos breves comentarios: aquí el primero y aquí el segundo). Y un libro que, sorprendentemente, no ha interesado a instituciones locales y regionales porque "no está escrito de forma literaria", y es que todavía hay gente que no entiende que la forma como se cuenta, también cuenta. De cualquier manera, un librito que os recomiendo encarecidamente.

Además de todo lo explicado anteriormente hace casi exactamente dos años que publiqué una entrada en este mismo blog contando algunas experiencias actuales (y muy interesantes) de recopilación y pervivencia de tradición oral en las aulas. Y, por último, también al hilo de todo lo aquí comentado os enlazo una entrada en la que hablé de una experiencia personal sobre el trabajo revitalización de tradición en las aulas, en Sabiñánigo (abril 2012).
Saludos

PD: Por cierto, hablaba ayer con Ana Griott y me contaba que está a punto de publicarse un libro en el que ha estado implicada y en el que se han recogido cuentos a niños y niñas por escuelas de la isla de Gran Canaria. Ganas tengo de verlo y disfrutarlo. Y de comentarlo aquí.

jueves, 4 de septiembre de 2014

En casa. Una breve historia de la vida privada

Acabo de terminar de leer el libro En casa. Una breve historia de la vida privada, escrito por Bill Bryson, traducido por Isabel Murillo y publicado por RBA. Este libro forma parte de la tercera tanda de Libros de resistencia; una vez más, gracias Mariona.


Basándose en los notables cambios de las viviendas en los últimos doscientos años el autor elabora una suerte de historia contemporánea, yendo habitación por habitación y mostrando infinidad de detalles, datos, anécdotas, sucesos, casualidades, personas, hábitos y, sobre todo, inventos. Se trata de un libro muy entretenido (y muy documentado) que, a pesar de sus más de 650 páginas, se lee como sin sentir, y que te proporciona unas "gafas" para ver de otra manera muchos de los elementos cotidianos de nuestro entorno: nos hemos acostumbrado rápido a lo bueno y no somos conscientes de todo lo que hay detrás de cada uno de estos pequeños ingenios que hacen que nuestros días sean más confortables y seguros.
Durante la lectura han sido muchos los momentos que he leído en voz alta a mi mujer y mis hijos páginas enteras del libro: amenas, curiosas, divertidas o brutales (en algunos detalles). Ha sido una pena para todos que se haya terminado tan pronto. [Un ejemplo de cita que colgué en este blog].
Si tuviera que ponerle algún pero sería el anglocentrismo: basar el grueso de la tesis en Inglaterra y Estados Unidos (especialmente en los siglos XVIII y XIX) sin pasar apenas por otras culturas y tiempos históricos. Salvada esta pega el libro es, en verdad, estupendo.
Saludos

miércoles, 3 de septiembre de 2014

Nuevas HOJAS VOLANDERAS

Todos los meses publico la Hoja volandera BOLETÍN, en ella enlazo artículos y noticias relacionadas con el devenir de mis días. Y con una periodicidad (más o menos) bianual, publico Hojas volanderas para BIBLIOTECAS y para EDUCACIÓN. En ellas comparto materiales, artículos, reseñas... que me parecen de interés.
Todo esto para deciros que hoy he publicado nuevas Hojas volanderas, os las enlazo por si os apetece echar un vistazo:
Saludos