Había una vez

Hace unos días que tengo encima de mi mesa un libro álbum maravilloso (que no dejo de leer y mirar y disfrutar) titulado Había una vez, el texto es de María Teresa Andruetto y las ilustraciones son de Antonio Santos. El libro está publicado por Diego Pun Ediciones.

Parece que el libro comienza contando la historia de Sherezade pero, tras las primeras líneas, nos encontramos con la voz de la propia Sherezado contando la historia de una mujer que cuenta la historia de otra mujer que cuenta la historia de otra mujer... y así, a modo de historias metidas en otras historias, de cajas dentro de cajas, de matrioscas que se repliegan una dentro de otra, nos vamos adentrando en el corazón de las historias (de la historia). Y allí, en su justo centro, nos encontramos de nuevo con la mujer que cuenta en las primeras páginas (bien se puede imaginar uno que en el corazón de las historias habita una mujer cuyas palabras cuentan y hacen que éste lata), una mujer, Sherezade, que es palabra y se sostiene de las palabras de otras muchas mujeres (que son carne, pero que son también palabra).
Este viaje al corazón de las historias se articula gracias a las voces de mujeres que aman los cuentos, que creen en los cuentos, que cuentan y viven en los cuentos. Este viaje se alimenta de historias de mujeres que cuentan, y de esta manera juntas, aunque parezca que están lejos unas de las otras (lejos en el tiempo, lejos en el espacio) están muy juntas en la palabra, sobreviven a los días y llegan incluso a vivir más allá de la muerte.
Mención aparte merecen las bellas ilustraciones de Antonio Santos, poderosas y sugerentes, que enriquecen la historia con sus paisajes y mujeres narradoras. Ah, y también hay que citar aquí la estupenda calidad del libro, el cuidado y buen hacer con el que la gente de Diego Pun mima sus libros.
Así pues el resultado es un libro hermosísimo, de esos que uno no se cansa de ver y volver a ver, de leer y disfrutar, de contemplar y saborear. Un librito que os recomiendo.
Saludos